¿Te has dado cuenta de esos pequeños puntos de óxido en tu frigorífico y te preguntas cómo deshacerte de ellos? No estás solo en esto.

De hecho, prevenir la corrosión de tu frigorífico no es solo una cuestión estética, es vital para la salud y la longevidad de tu electrodoméstico.

Qué es la corrosión?

La corrosión es el proceso de deterioro de los metales debido a reacciones químicas con su ambiente. En el caso de un frigorífico, esto puede suceder tanto en el interior como en las partes externas. Hay varios tipos de corrosión, como la corrosión galvánica, por picaduras, y la corrosión por erosión, cada una con sus propias características y formas de tratamiento.

Principales factores de riesgo en la formacion de oxido en nuestro frigorifico

Para prevenir la corrosión, primero debemos entender sus causas más frecuentes:

• Humedad: la condensación dentro y fuera del frigorífico promueve la corrosión. Esta se produce principalmente durante cambios de temperatura o si el frigorifico se ha quedado abierto
• Salinidad del ambiente:Si vives cerca del mar o en una región con alto contenido de sal en el aire. La sal es un acelerador de la corrosión y puede ser especialmente dañina para los metales y componentes de tu frigorifico.
• Derrames:Los alimentos cítricos como los tomates, mariscos y las carnes rojas pueden acelerar el proceso de corrosión si entran en contacto directo con las partes metálicas del frigorífico.
• Limpieza Poco Frecuente: la acumulación de polvo, grasa y residuos de alimentos también expone las superficies metálicas.
• Arañazos: rayones en la pintura exponen el metal subyacente.
• Calor: las altas temperaturas aceleran las reacciones químicas que producen corrosión.

Cómo afecta la corrosión a la longevidad del frigorífico

No tomar medidas para evadir la oxidacion puede resultar en problemas más serios, como el mal funcionamiento del frigorífico y, en casos extremos, la necesidad de reemplazar el electrodoméstico por completo. Además, la corrosión puede afectar significativamente la eficiencia energética del aparato, lo que a la larga podría significar un aumento en tus facturas de electricidad.

Reconociendo los primeros síntomas

Descoloración y manchas

Si ves en las zonas metalicas localizas pequeños bultos,manchas marrones o decoloración, ¡Alerta Roja! . Estas manchas pueden aparecer en diferentes colores :

• El óxido formado apatir del hierro: tonos rojizos y pardos.
• El óxido formado apatir del cobre: da verdes y turquesas.
• El óxido formado apatir del cobalto: azules.
• El oxido formado apatir del níquel: verdes , azules y marrones.

No ignores estos signos, ya que pueden ser el preludio de problemas más serios.

Olor metálico en el frigorífico

Si empiezas a notar un olor metálico en tu frigorífico, este podría ser otro indicativo de corrosión en desarrollo. Este olor es resultado de las reacciones químicas que están deteriorando el metal. Es vital atender estos síntomas temprano para evitar daños a largo plazo para tu nevera pero sobre todo tu salud.

Soluciones caseras para la prevención

Uso de bicarbonato de sodio

El bicarbonato de sodio es un agente limpiador natural que también puede actuar como un neutralizador de ácidos, lo cual es beneficioso para evitar la corrosión. Esparcir una pequeña cantidad en las áreas propensas a la corrosión puede ayudar a mantener el problema a raya.

Vinagre como agente de limpieza

Aunque pueda parecer contradictorio utilizar un ácido como el vinagre, este tiene propiedades desinfectantes que pueden ser útiles. Sin embargo, es crucial diluir en y enjuagar bien después de su uso para evitar cualquier acción corrosiva del mismo ácido.

Productos comerciales

Esmaltes y sprays anti-corrosivos

Existen en el mercado una variedad de productos diseñados específicamente para combatir la corrosión en metales. Desde esmaltes hasta sprays, estos productos forman una capa protectora sobre el metal que impide que agentes corrosivos entren en contacto con él.

Materiales propensos a la corrosión

Acero inoxidable vs aluminio

Algunos materiales son más resistentes a la corrosión que otros. Por ejemplo, el acero inoxidable es conocido por su resistencia a la corrosión, mientras que el aluminio es más susceptible. Conocer el tipo de material del que está hecho tu frigorífico te ayudará a tomar medidas preventivas más efectivas.

Recubrimientos y aleaciones

Los fabricantes a menudo utilizan recubrimientos y aleaciones para hacer que las partes metálicas de los frigoríficos sean más resistentes a la corrosión. Estos recubrimientos pueden ser de zinc, níquel o incluso una capa de pintura especial. Mantener estos recubrimientos en buen estado es crucial para evitar la corrosión.

Prevención temprana

Limpieza adecuada

Una de las formas más efectivas de prevenir la corrosión es mantener el frigorífico limpio. El uso de productos de limpieza apropiados y una rutina regular pueden hacer maravillas en la prevención de la corrosión.

Secado del interior del frigorífico

Después de la limpieza, asegúrate de secar todas las áreas, especialmente las partes metálicas. La acumulación de humedad es una de las principales causas de corrosión, por lo que mantener las áreas secas es crucial.

Uso de productos anti-corrosivos

Hay productos específicos diseñados para prevenir la corrosión en electrodomésticos. Estos pueden ser en forma de sprays, toallitas o incluso dispositivos que controlan la humedad dentro del frigorífico.

Soluciones caseras para la prevención

Uso de bicarbonato de sodio

El bicarbonato de sodio es un agente limpiador natural que también puede actuar como un neutralizador de ácidos, lo cual es beneficioso para evitar la corrosión. Esparcir una pequeña cantidad en las áreas propensas a la corrosión puede ayudar a mantener el problema a raya.

Vinagre como agente de limpieza

Aunque pueda parecer contradictorio utilizar un ácido como el vinagre, este tiene propiedades desinfectantes que pueden ser útiles. Sin embargo, es crucial enjuagar bien después de su uso para evitar cualquier acción corrosiva del ácido.

Mantenimiento regular

Planificación y ejecución

Para mantener tu frigorífico en las mejores condiciones, establece un calendario de mantenimiento regular. Esto incluye limpieza, inspección de partes metálicas y aplicación de productos anti-corrosivos.

Contratación de servicios profesionales

Si la corrosión ya es un problema serio, o si prefieres un enfoque más profesional, existen servicios especializados que pueden tratar la corrosión de manera efectiva y ofrecer soluciones a largo plazo.

Errores comunes a evitar

Uso de productos abrasivos

Algunos productos de limpieza pueden ser demasiado abrasivos para los metales, lo que en realidad puede acelerar el proceso de corrosión. Es importante elegir productos que sean seguros para el tipo de metal de tu frigorífico.

Dejar zonas húmedas

Después de limpiar el frigorífico, asegúrate de que no quede humedad. Cualquier residuo de agua puede contribuir a la corrosión, especialmente en áreas que ya son propensas a ella.

Conclusión

La corrosión puede ser un verdadero enemigo para la longevidad de tu frigorífico, pero con la información y las estrategias adecuadas, puedes combatirla eficazmente. Desde la elección de materiales hasta un correcto mantenimiento, cada pequeño detalle cuenta. No subestimes el poder de una buena prevención; tu frigorífico y tu bolsillo te lo agradecerán.